EL dÍa 22 de Junio, en la efeméride militar, se celebra el "DIA DEL SUBOFICIAL MAYOR DE EJÉRCITO", día en que le representamos nuestro sentimiento de cariño al madrugador y ex SOM. Alfredo Sepùlveda, y en nuestra oración trajimos el recuerdo de nuestro querido Madrugador Fundador SOM. Julio Alfaro, con muchos años al servicio del Señor y peregrino y misionero de la Mater junto a su esposa Mercedes. Julio estaba delicado de salud, y lo divisé en mis visitas al Hospital Militar muy íntegro y como siempre muy enérgico visitando médico para sus exámenes, señalándome que estaba con algunos problemas de la columna y como siempre, hizo todo lo que tenía que hacer con su propia fuerza. Siempre me llamó la atención su integridad, debe ser por su carácter de soldado, que no anda con medias tintas , sino fuerte y certero aún en la enfermedad.
La Madrugada de ese día fue fría en lo climático, pero siempre acogedora y tibia en nuestra oración, tan importante y motivo real de nuestro encuentro, y en nuestra relación de amigos. Sin duda que cada Madrugada es distinta y en cada una de ellas tenemos ausencias involuntarias.
La Santa Misa la presidió el Padre Jaime, sacerdote que nos está acompañando desde la Parroquia "Los Doce Apòstoles", en ausencia del Padre Vicente que anda de viaje por España.
Bueno las fotos permiten evitar mayores comentarios:
DESAYUNO DE AMISTAD
Sin duda que después de nuestra oración, tenemos como tradición el compartir un desayuno de amistad. Nuestro tema de ese día, aparte de los detalles de la Madrugada, fue precisamente la salud de nuestro hermano Julio, y en realidad conversamos de lo difícil que resultaba para él en estos instantes, sostenerse, puesto que la enfermedad ya lo había postrado en cama. Todo fue muy rápido y oramos con mucho cariños por él en varias ocasiones En el término de la mañana, antes de iniciar el retorno a nuestros hogares, David Finch nos dice: "Me acaban de avisar que Julio se fue anoche a las 0 horas." Y por supuesto que fue el balde de agua fria, pero también un bálsamo de tranquilidad, puesto que su partida generosa al lado de la MAter, evitaba un sufrimiento innecesario para su esposa y por supuesto para èl. Julio al parecer no tuvo hijos. Así que junto a su esposa nos dieron muchas horas de vida y de trabajo y ellos eran fieles seguidores de María y colaboradores permanentes de las actividades del Santuario.
En esa tristeza propia de hombres humanos con sentimientos, nos organizamos y ya tendremos tiempo para publicar con más detalles, los últimos momentos compartidos con nuestro hermano Madrugador Julio Alfaro, que ya serà parte de nuestro recuerdo y permanente oración en nuestras Madrugadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario